PIZZA DE
CEBOLLA MACERADA EN ACEITE DE OLIVA
Ingredientes
masa:
150cc de agua tibia
½ cucharadita de azúcar
125 grs de harina blanca
125 grs de harina integral
½ cucharadita de sal
½ cucharadita de levadura seca
Relleno:
Queso rallado
Mozzarella
Cebolla macerada
Atún en aceite (opcional)
Elaboración:
Unas horas
antes o mejor el día anterior, prepararemos la cebolla. La cortamos a
pluma y la guardamos en un frasco hermético, añadiéndola sal, pimienta y aceite
de oliva virgen extra, tapar y mezclar bien agitando el frasco de vez en cuando
mientras se macera. Mantener en la nevera hasta que lo vayamos a utilizar. Aguanta
varios días perfectamente.
Vamos con la masa: Disolver el azúcar en el agua
tibia. Aparte mezclar las harinas con la
levadura y la sal.
Añadir el agua a la mezcla de harinas y amasar
hasta que la masa este suave. Dejar leudar aproximadamente 1 hora o hasta que
doble su tamaño.
Ahora es el momento de estirarla y rellenarla con
los ingredientes deseados…
En este caso la rellenaremos por este orden: El
queso rallado, después la cebolla macerada (escurrir el aceite si la queréis
menos grasa), unos taquitos de mozzarella y unos pegotitos de atún en aceite.
Meter la pizza al horno previamente calentado a
225º unos 25 o 30 minutos. Ya sabéis que
cada horno es un mundo. El punto es que la masa esté doradita en los bordes, pero
que no se queme la cebolla. Servir al momento y disfrutar.
NOTA: Esta receta hace muchos
años me la dieron en una pizzería del centro de Madrid. Por supuesto eran
italianos, siendo esta pizza su especialidad. Así sencilla, sin tomate, con
pocos ingredientes pero increíblemente deliciosa.
Probad a tener como norma un bote de esta cebolla
macerada con aceite en la nevera. Tiene larga duración y nos ayuda en múltiples
preparaciones como: pizzas, cocas, ensaladas, carnes, pescados….
Seguro que se os ocurren muchas más ideas
